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El Programa de prácticas en la empresa familiar que impulsa la ASCEF tiene por objetivo poner en contacto a jóvenes integrantes de una familia empresaria y que forman parte del Fórum de jóvenes de la ASCEF con una empresa también familiar, pero que no es la suya. Este es un programa que ha tenido una gran acogida y que todos los participantes, tanto empresas como jóvenes en prácticas y la ASCEF consideran una experiencia enriquecedora que valoran muy positivamente.

Las empresas receptoras disfrutan del talento, impulso y curiosidad de los jóvenes en prácticas que quieren tener una primera experiencia profesional en el mundo empresarial o vivir una experiencia profesional fuera del entorno de la propia empresa familiar.

Por otra parte, los jóvenes tienen la oportunidad de aprender y crecer. Pueden vivir y conocer en primera persona la realidad de una empresa familiar muy diferente a la suya, con formas de hacer diferentes, dentro de otro sector industrial o de servicios, pero que al mismo tiempo comparten con su propia empresa de origen la idea de unos valores y un legado que es necesario transmitir a las nuevas generaciones.

Para la ASCEF  es un privilegio impulsar este programa que pone en contacto a dos empresas familiares porque estamos facilitando la relación entre nuestros asociados, propiciando sinergias entre dos empresas y familias empresarias que irán más allá de este período de prácticas y fomentando el espíritu empresarial en las nuevas generaciones.

Si eres miembro del Fórum de jóvenes y quieres participar en el Programa de prácticas en la empresa familiar o, como empresa, quieres recibir y contribuir a la formación de nuestros jóvenes, ponte en contacto con nosotros.

 

Hablamos con Álvaro López de Argumedo, abogado y socio de Uría Menéndez, para conocer cómo es un proceso de mediación en la empresa familiar, sus peculiaridades por la implicación de relaciones profesionales/personales, las emociones que comporta y, sobre todo, la complejidad de los conflictos que pueden producirse.

¿Qué ventajas tiene la mediación en la empresa y, en concreto, en la empresa familiar?

La mediación es un mecanismo alternativo de resolución de disputas, estrictamente voluntario, en virtud del cual dos o más partes tratan de resolver un conflicto y llegar a un acuerdo con la ayuda de un tercero neutral e imparcial (el mediador).

La mediación comercial tiene muchas ventajas, pudiendo citar algunas como: (i) evita la confrontación directa entre las partes y los consiguientes costes en términos de tiempo y dinero; (ii) permite a los altos responsables de las empresas en conflicto evaluar su posición real fáctica y jurídica; (iii) es ágil, informal y se adapta con flexibilidad; (iv) las partes mantienen el control del conflicto; (v) permite que un tercero neutral, conjuntamente con las partes, marque el ritmo y los contenidos del proceso; y (vi) dura solo lo que quieran las partes. Otra de las ventajas de la mediación es la confidencialidad del procedimiento y de toda la documentación, con la obligación de secreto profesional extendida al mediador, instituciones y partes involucradas (artículo 9 de la Ley de Mediación).

Además, a diferencia de lo que ocurre con los procedimientos judiciales (que son difíciles de revertir una vez iniciadas), la mediación en España se inicia y finaliza de manera completamente voluntaria.

Adicionalmente debe señalarse que el Proyecto de Medidas de Eficiencia Procesal tramitado por el Congreso de los Diputados durante la legislatura pasada convertía a la mediación en un requisito procesal obligatorio para poder presentar la demanda. Esta normativa todavía no ha entrado en vigor, pero precisamente esta semana se ha publicado que el Gobierno va a aprobar un nuevo Proyecto de Ley Orgánica de los Métodos Alternativos de Solución de Conflictos, en el que parece que se va a remitir al Congreso un texto que también convierte a la mediación en requisito procesal obligatorio (https://confilegal.com/20240312-el-gobierno-aprobara-hoy-el-proyecto-de-ley-organica-de-los-metodos-alternativos-de-solucion-de-conflictos/).

La mediación es especialmente idónea en el contexto de las empresas familiares, donde las relaciones personales y familiares están estrechamente entrelazadas con la dinámica empresarial, ya que ofrece un espacio para “enfriar” las emociones y buscar soluciones que satisfagan a todas las partes involucradas a medio/largo plazo.

La experiencia demuestra que la mediación también destaca por su capacidad para abordar situaciones de alta complejidad y donde el componente jurídico-legal puede no ser la principal cuestión a tener en cuenta (algo habitual en las disputas en las empresas familiares).

 ¿Puede explicarnos brevemente las fases de un proceso de mediación?

•  Fase inicial: una vez nombrado, el mediador cita a las partes a la denominada “sesión informativa”, donde les indica su profesión, formación y experiencia, las circunstancias que pudieran afectar a su imparcialidad y cómo se va a desarrollar la mediación y sus consecuencias legales (procedimiento, confidencialidad, etc.); seguidamente, se celebra la denominada “sesión constitutiva”, que da comienzo propiamente a la mediación, en la cual las partes expresan al mediador su deseo de desarrollar la mediación y dejan constancia de su identificación, la designación del mediador, el objeto del conflicto, el programa de actuaciones, sus respectivas posiciones, etc. La fase inicial se suele celebrar en una reunión conjunta, alrededor de una mesa en la que se sientan tanto el mediador como las partes.
•  Fase de exploración: el mediador busca comprender mejor las necesidades e intereses de cada parte, y promueve un diálogo fluido para poder encontrar oportunidades de acuerdo (lo que se suele hacer mediante la celebración de reuniones privadas, denominadas caucus). En esta fase suele ser crucial que el mediador distinga entre las posiciones de las partes y los verdaderos intereses de estas.
  

• Fase de negociación: el mediador utiliza sus habilidades de negociación para ayudar a las partes a formular e intercambiar ofertas de manera eficaz, ya sea mediante reuniones conjuntas, reuniones privadas o una combinación de ambas, con el objetivo de intentar llegar a un acuerdo.

 ¿Cómo debe ser el acuerdo fruto de un proceso de mediación?

Si las partes alcanzan un acuerdo durante la mediación, éste se debe reflejar por escrito.

El contenido mínimo del acuerdo de mediación, establecido por la ley, debe incluir la identificación de las partes, el lugar y la fecha de suscripción del acuerdo, las obligaciones asumidas por cada parte, la indicación de haber seguido un procedimiento de mediación ajustado a la ley y la identificación del mediador y/o de la institución de mediación involucrada (artículo 23.1 de la Ley de Mediación).

¿Podría explicarnos dos o tres situaciones en que la mediación ha demostrado ser útil?

1.-La sucesión en una empresa familiar y la cautela Socini

El fundador de una empresa familiar dejó en herencia una serie de acciones solo a una parte de sus herederos, mientras que a la otra parte le legaba inmuebles. Asimismo, el testamento establecía una disposición, denominada cautela Socini, en virtud de la cual cualquier heredero que impugnara las disposiciones testamentarias vería reducida su participación en la herencia a la legítima estricta. Se inició un conflicto judicial entre herederos, pero el inicio de una mediación permitió finalmente lograr una resolución eficiente y pacífica del conflicto, promoviendo la armonía entre todos los herederos afectados

2.-Las desviaciones por el suministro de Gas Natural Licuado

El incumplimiento de una parte de su compromiso de entrega de Gas Natural Licuado (GNL) terminó provocando una serie de disputas que derivaron en dos arbitrajes y en la ejecución de uno de los laudos dictados. Una combinación de mediación y de negociaciones extrajudiciales permitieron a las partes involucradas alcanzar un acuerdo, lo que también supuso la finalización del procedimiento de ejecución del laudo.

 

 

La Asociación Catalana de la Empresa Familiar (ASCEF) ha presentado en el Colegio de Notarios de Cataluña el nuevo libro “RETOS Y RIESGOS DE LA SUCESIÓN EN LA EMPRESA FAMILIAR”, editado por Aranzadi, con el apoyo de ASCEF y Crowe, coordinado por el Dr. Jorge de Juan Casadevall y Antoni Bosch Carrera, y el primero en abordar el relevo generacional desde un triple enfoque económico, jurídico y psicológico. “Esa es su gran originalidad. Por primera vez se aborda en un estudio de estas características la problemática del relevo generacional desde esta triple perspectiva, dando cuenta de su complejidad intrínseca y ofreciendo una solución integrada, desde la organización empresarial y respondiendo a múltiples aspectos civiles , mercantiles o fiscales que suscita, pero sin olvidar la imprescindible gestión emocional que acompaña a un proceso de esta naturaleza”, afirma Jaume Alsina, presidente de ASCEF, que prologa el libro, donde también incide en que el relevo generacional es de tal complejidad que debe ser fruto de una planificación cuidadosa sucesoria, con la implicación de todos los miembros de la familia y con la ayuda externa de profesionales para que la sucesión sea un éxito.

‘Retos y Riesgos de la Sucesión de la empresa familiar’ es una obra colectiva y multidisciplinar de ASCEF con las cátedras catalanas integradas en la Red de Cátedras de la Empresa Familiar del Instituto de la Empresa Familiar. Profesores universitarios de estas cátedras, que compaginan sus funciones académica y profesional, han volcado todo su saber en esta gran obra, desde sus respectivas disciplinas, garantizando así la transferencia del conocimiento desde el mundo universitario al de la familia empresaria, en cinco capítulos: “Formas de sucesión de la empresa familiar”, “Retos y riesgos de la sucesión”, “Retos psicológicos de la sucesión”, “Retos y riesgos psicológicos de la sucesión” y “Planificación sucesoria”.

“A lo largo del libro se exponen todas las dificultades que se generan en esta transición y las fuerzas que inciden contra una planificación satisfactoria de la sucesión. El objetivo es ayudar a los miembros de la empresa familiar a comprender los problemas y a enfrentarse a la sucesión analizando todas las opciones”, explica el Dr. Jorge de Juan Casadevall, coordinador del libro, director de la Cátedra de Empresa Familiar Bosch-Aymerich, socio en Crowe Legal y Tributario y Abogado del Estado (Exc).  Frente a este escenario, el libro plantea la consecución de una sucesión exitosa mediante una cuidada planificación. “El gran objetivo de una sucesión exitosa debe ser liderar una empresa rentable, mantener la cohesión y armonía familiar, dar una continuidad generacional a la empresa, y preservar el patrimonio”, afirma Antoni Bosch Carrera, coordinador del libro, notario y profesor de Derecho Civil de la UIC.

“Las ventajas de la sucesión exitosa son la construcción de una relación armoniosa para la familia y la empresa; el impulso de una cultura familiar y empresarial asentada en unos valores y sueño compartidos; el aumento de las posibilidades de éxito, al evitar la incertidumbre que eleva el riesgo de conflicto; la resolución de conflictos en tiempos más cortos y de forma constructiva; y la planificación del desarrollo personal y profesional de la siguiente generación, ya que el liderazgo es el factor diferencial de una empresa familiar y de la familia empresaria exitosa”, explica el profesor Bosch.

“Es muy importante que las cuestiones legales no compliquen aún más el proceso sucesorio, de por sí complejo. El papel del Derecho es fundamental. Arbitra los instrumentos jurídicos para acompañar en este proceso y convoca aspectos tan dispares como el régimen económico conyugal, el Derecho sucesorio, el gobierno corporativo de la familia empresaria, el control de la transmisibilidad de participaciones sociales fuera del núcleo familiar, los instrumentos jurídicos de transmisión de la Empresa Familiar (sucesión testamentaria o pactada, o donación), y la adecuada optimización fiscal”, puntualiza el Dr. de Juan Casadevall.

El libro concluye que es preciso separar Propiedad/Gestión/Familia, y aporta diferentes fórmulas al respecto teniendo en cuenta también el compromiso social, ambiental y de buen gobierno (ESG) de la empresa. Desde el ángulo empresarial, es importante dotarse de una estructura corporativa óptima que permita el adecuado gobierno de la empresa familiar y anima a adoptar el Protocolo Familiar, figura jurídica producto de la autorregulación que es el documento apropiado para deslindar esos tres círculos (Propiedad, Gestión y Familia). Desde la perspectiva jurídica, recuerda que la falta de planificación puede llevar a una elevada litigiosidad o a una carga fiscal tan alta que impida la viabilidad económica de la empresa. Y, desde el enfoque psicológico, incide en buscar el equilibrio entre acompañar y delegar al sucesor, transmitiéndole confianza, permitir el error y el aprendizaje, con un estilo participativo y ofreciendo oportunidades, y que el mentoring de las nuevas generaciones es un instrumento valioso para facilitar el proceso de sucesión y que esta sea exitosa.

 

Los señores Carlos Franco, asesor técnico del CDTI y Joan Sansaloni, líder del equipo Propiedad Industrial e Intelectual de ACCIÓ de la Generalitat de Catalunya, han participado en un encuentro organizado por la Comisión de Innovación de la ASCEF (Asociación Catalana de la Empresa Familiar). Jornadas como ésta, ofrecen la oportunidad de aprovechar la sinergia entre empresas y administración para alcanzar metas comunes, permitiendo aportar un valor añadido a la sociedad.

El martes 27 de febrero, la Asociación Catalana de la Empresa familiar, ASCEF ha presentado el Observatorio INBONIS de la Empresa Familiar, desarrollado por Inbonis Rating, la agencia de calificación crediticia pionera en el rating de pymes y midcaps en Europa, con el apoyo del Instituto de la Empresa Familiar. Alberto Sánchez Navalpotro, CEO de Inbonis Rating, y Esteban Sastre, director de economía y empresa del IEF, han presentado el informe del Observatorio. Una de las ventajas de la calificación crediticia es que, más allá de los informes cuantitativos de cuentas, la calificación incorpora criterios cualitativos referidos a modelo de negocio, riesgos financieros, gobierno corporativo o  entorno económico.

Tras emitir más de 550 informes de calificación crediticia, la primera conclusión del Observatorio INBONIS es que las empresas familiares tienen mejor rating que las no familiares: más del 77 % de las empresas familiares obtienen calificaciones comprendidas entre B y BBB, en contraste con el 67% de las empresas no familiares que se sitúan en ese rango.  Además, se observa un incremento significativo en el porcentaje de empresas que alcanzan la calificación BB: casi el 44% en el caso de empresas familiares, en comparación con menos del 35% para las no familiares. Las causas están en los valores intrínsecos de la empresa familiar: vocación de continuidad, un accionariado con experiencia y equipos muy comprometidos.

Además, se observa una correlación entre aplicación de criterios ESG y rating crediticio:  las empresas familiares con mejor calificación crediticia tienen una mejor gestión de sus riesgos ESG, así, sólo las empresas familiares con una buena gestión de ESG alcanzan la calificación crediticia BB+.

Los responsables del Observatorio han explicado que la incorporación de los aspectos cualitativos al análisis de riesgos reduce la probabilidad de impago percibida en más de 30 puntos, por lo que el estado de las empresas es sustancialmente mejor de lo que pueden decir únicamente sus estados financieros. Además, las empresas familiares son más resilientes, superan mejora las crisis económicas porque se adaptan mejor y resisten mejor la caída de ingresos.

Un aspecto para mejorar que señala el Observatorio para la empresa familiar es la gestión financiera, especificando que hay margen de mejora en la diversificando de sus fuentes de financiación o equilibrando su política de pagos y cobros, por ejemplo. Por ello, la segunda parte de la sesión se ha dedicado a analizar cuáles son las posibles fuentes de financiación más allá de la banca para las empresas hoy.

En la mesa redonda moderada por Jaume Alsina, presidente de la ASCEF, han participado Alberto Sánchez Navalpotro, Alicia Martín, directora comercial de LB Oprent, y Quim Pagespetit, director financiero de Casa Mas.  Alberto Sánchez ha recordado que nos encontramos ante un cambio de paradigma en que los banco son más reacios a ofrecer créditos a largo plazo, por lo que las empresas deben aprovechar las oportunidades que ofrecen las alternativas de financiación. Por eso, ha sido especialmente interesante conocer el testimonio de los otros dos invitados que han compartido su experiencia en la búsqueda y manejo de financiación privada y pública a largo plazo.

 

 

El 1 de febrero en la Cambra de Comerç de Barcelona, la ASCEF celebró la primera sesión del ciclo Programa de Desarrollo para Familias Empresarias a cargo del Prof. Manuel Bermejo. Con el título: “Una visión moderna y dinámica de la empresa familiar y la familia empresaria”, tuvo como objetivo ofrecer una visión muy práctica del tema para permitir a los asistente generar un impacto positivo en su familia y en su empresa.

Hemos iniciado el ciclo de encuentros con CEOs, impulsado por la ASCEF y el Cercle Tecnològic. En esta primera sesión hemos contado con Rubén Bonet, CEO de Fractus, y Ramon Carbonell, CEO de AUSA, para conversar sobre su rol como CEO y sus casos de éxito, dando a conocer cómo se ha integrado la tecnología en el desarrollo de sus empresas.
Ha dado la bienvenida a los participantes Xavier Sellarès, director del Círculo Tecnológico, que ha destacado la necesidad de contar con la mirada de los CEOs, que son los máximos ejecutivos quienes deben fijar el tono, dirección e intensidad de la transformación digital que deben adoptar sus organizaciones. La sesión la ha dirigido y moderado Fabrizio Magnani, Executive partner de Gartner, quien ha puesto en valor que «el trabajo de CEO es un trabajo complejo, ya que debes tocar muchas teclas, saber delegar y adaptarte a diferentes desafíos» .
Fractus es una compañía pionera en el desarrollo de antenas internas para teléfonos y otros smartphones. A lo largo de 25 años han logrado crear productos y generar patentes que actualmente se encuentran en todo el mundo. “En mi caso, soy CEO fundador y al arrancar la empresa desde cero debes decidir hacia dónde vas. Todas las microactuaciones que hemos ido haciendo estos 25 años han cobrado sentido, pero lo importante es no perder la dirección”, ha explicado Rubén Bonet.
Por su parte, AUSA es un fabricante global de equipos compactos todoterreno para el transporte y manipulación de materiales. Su CEO, Ramón Carbonell, ha señalado que «la tecnología fue la base del crecimiento de la empresa». «Trabajamos en sectores reacios a la innovación como la agricultura y la construcción y buscamos transformarlos y aportar soluciones, sobre todo, en materia de sostenibilidad», ha añadido.

Este 16 de enero hemos celebrado la 2ª. Sesión del Ciclo sobre «Mediación y empresa familiar» en colaboración con Fide Fundación, y la Fundació Mediació Notarial del Col·legi Notarial de Catalunya, con el título “¿Cómo es una mediación?» a cargo del Sr. Álvaro López de Argumedo.

Iniciando este 2024, empezamos nuestras actividades con la celebración de un desayuno-coloquio con el Hble. Sr. Carles Campuzano, conseller de Derechos Sociales de la Generalitat de Catalunya, con la participación de diferentes empresarios familiares catalanes de ASCEF.

En el año 2000 se creó el Fórum de Jóvenes de la ASCEF con el objetivo de dar voz y un espacio de participación a las nuevas generaciones de las familias empresarias. El Fórum de Jóvenes fomenta las relaciones de los jóvenes más allá de si tienen un cargo ejecutivo en la empresa familiar y genera sinergias presentes y futuras.
El Fórum de Jóvenes muestra la pasión y el compromiso de los jóvenes con la empresa y con la Asociación.