Los socios de ASCEF, al servicio de la sociedad ante la pandemia del COVID-19
Abril 2020.- En una situación como la actual, son muchas las empresas que se convierten en aliadas de los colectivos más expuestos al virus y que actúan para dar apoyo a los ciudadanos más vulnerables. La empresa familiar, especialmente comprometida con su entorno, es también un ejemplo:
La farmacéutica Almirall ha puesto en marcha un plan de acción con diversas medidas para dar respuesta al COVID-19 y apoyar a los profesionales sanitarios, como por ejemplo la donación de equipos de protección (mascarillas, guantes y batas, entre otros) y la donación de cremas tópicas para reducir la piel seca y dañada debido al uso prolongado de mascarillas y desinfectantes. También ha reacondicionado de forma parcial las instalaciones de producción para fabricar geles antibacterianos y colaborará junto con la Fundación Leitat para desarrollar respiradores fabricados por medio impresiones 3D destinados a hospitales y unidades de cuidados intensivos.
En el caso de Girbau, la empresa de soluciones integrales de lavandería profesional, ha cedido al Hospital Clínic de Barcelona una lavadora portátil para apoyar a la tarea de limpieza y desinfección de tejidos. La maquinaria permite lavar y desinfectar cada día hasta 720 kilos de ropa de personal médico, como también hacer pruebas de comportamiento de materiales al lavado.
La compañía dermocosmética MartiDerm ha hecho una donación a la Cruz Roja de 2.500 unidades del Kit de apoyo dermatológico MartiDerm Covid-19, compuesto con tres productos: un gel desinfectante hidroalcohólico, una crema de manos intensiva y tres parches de crema para piernas cansadas.
Por su parte, Cacaolat, empresa de la cual Damm es propietaria del 50%, ha donado 60.000 botellas de batidos de cacao y leche a diversas organizaciones para contribuir a paliar los efectos de esta situación y agradecer al personal sanitario los esfuerzos que realizan. Las donaciones se han realizado a asociaciones como el Banco de los Alimentos, la Cruz Roja, Cáritas, el Colegio de Médicos de Barcelona y diversos colectivos de centros hospitalarios.
Carolina Herrera, propiedad del grupo Puig, ha adaptado su línea de producción de sastrería en Vacarisses para confeccionar batas y mascarillas para centros sanitarios y la industria alimentaria.
Puedes consultar otras muestras de solidaridad y buenas prácticas de los socios de ASCEF.