Conseguir los niveles de excelencia y buen gobierno en la empresa familiar requiere que los socios ejerzan su posición con conocimiento y rigor
La formación de los accionistas de la empresa familiar es esencial para el buen funcionamiento de esta, y es básico, como propietarios y propietarias actuales o futuros, tener los conocimientos necesarios. Bajo esta premisa, la Asociación Catalana de la Empresa Familiar (ASCEF) organizó con éxito una nueva edición del programa de formación del socio y socia de la empresa familiar, a cargo de los expertos del despacho de abogados Cuatrecasas.
La sesión se planteó con el objetivo de ofrecer las herramientas de conocimiento que puedan ayudar a desarrollar su rol de accionistas con responsabilidad, ya que para conseguir los niveles de excelencia y buen gobierno en la empresa familiar se requiere que los socios y las socias ejerzan su posición con conocimiento y rigor. La calidad de la toma de decisiones dependerá del conocimiento y la información que se proporcione a los miembros de la compañía. Al final, la inversión de recursos en la formación del socio y socia ayuda que los miembros de la familiar empresaria se interesen y se involucren en la sociedad.
Por esto, es fundamental transmitir a las sucesivas generaciones la importancia de proteger el patrimonio empresarial y familiar, y que esta inquietud para la formación se traslade a las siguientes generaciones como un elemento inherente a la responsabilidad que debe tener todo socio y socia de la empresa familiar, sea partícipe o no en la gestión.
La sesión estuvo dividida en tres partes diferenciadas: los derechos y las obligaciones del socio y socia; la protección patrimonial ante situaciones personales; y los aspectos tributarios específicos de la empresa y de la tributación personal de los socios.