Nuestro colaborador Cuatrecasas, nos amplía algunos aspectos sobre fiscalidad que pueden resultar de interés para todos:

¿Cuáles son las tres claves de la fiscalidad en la empresa familiar?

Las tres claves para reforzar la posición fiscal de la empresa familiar són: proactividad, eficiencia y realismo.

La proactividad es vital porque la revisión recurrente de los puntos clave (inversiones, requisitos, estructura, etc.) es imprescindible para la consecución de las ventajas asociadas a la empresa familiar. Por ejemplo, revisar la retribución correcta de las personas encargadas de cumplir los requisitos de gestión de la empresa familiar puede ahorrarnos sustos importantes que podrían, incluso, afectar a la viabilidad del negocio en caso de una sucesión.

Respecto a la eficiencia, la clave es encontrar el punto medio entre ahorro fiscal, el coste asociado al cumplimiento de los requisitos, la rentabilidad total y las perspectivas de futuro. Por ejemplo, en posiciones más patrimonialistas es relevante que el ahorro fiscal (inversión en activos aptos) no nos haga perder de vista la necesidad de proteger el capital y encontrar una rentabilidad razonable.

El realismo: no hay decisiones buenas o malas, existen decisiones bien informadas o mal informadas. Para una buena salud fiscal en la empresa familiar es clave saber dónde estamos ante una interpretación razonable de la norma y la doctrina administrativa. Solo con esta dosis de realismo, se pueden tomar decisiones correctas sobre el perfil de riesgo que se desea asumir. Por ejemplo, la posición de la administración tributaria respecto a la tesorería ociosa y su consideración como activo afecto o necesario para la actividad.

¿Cuáles son los incentivos relativos a la fiscalidad de la empresa familiar?

El régimen fiscal de la empresa familiar puede asociarse a los siguientes beneficios fiscales:

• Aplicación de un régimen de exención en el Impuesto sobre el Patrimonio (IP) y en el Impuesto de Grandes Fortunas (IGF) por el valor de la empresa, en proporción a los activos afectos.
• Aplicación de una reducción estatal en la base imponible del Impuesto sobre Sucesiones del 95% del valor de la empresa, en proporción a los activos afectos.
• Aplicación de una reducción estatal en la base imponible del Impuesto sobre Donaciones del 95% del valor de la empresa, en proporción a los activos afectos.
• Ausencia de ganancia patrimonial en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) en el caso de donación de las participaciones de entidades que cumplan el régimen de la empresa familiar (la aplicación del régimen de exención o reducción exige cumplir estrictamente todos los requisitos y además su aplicación puede ser parcial si la sociedad dispone de activos no afectos).

¿Cómo puede mejorar su fiscalidad la empresa familiar? ¿De qué herramientas disponemos?

Las posibles vías para mejorar la fiscalidad son a través de la gestión del balance de las sociedades familiares, el seguimiento y cumplimiento de los requisitos y la mejora continua de la estructura.

Respecto al balance, la clave de la empresa familiar es entender que el incentivo fiscal busca proteger a la economía productiva y que es clave que las inversiones y la gestión de la tesorería vayan encaminadas a este objetivo. Por ejemplo, realizar recurrentemente planes de inversión y seguimiento de las inversiones analizadas y descartadas nos puede ayudar a demostrar el espíritu de inversión “productivo”.

En cuanto a los requisitos de la empresa familiar, es indispensable realizar un seguimiento, como mínimo anual, del cumplimiento de los mismos. Mantener una disciplina en este seguimiento nos garantiza tener bajo control el riesgo formal del incentivo fiscal. Por ejemplo, tener monitorizado los distintos rendimientos de trabajo de la persona que asegura el cumplimiento de los requisitos es indispensable para garantizar que más del 50% de los rendimientos provienen de la dirección de la empresa familiar.

Por último, la parte más importante de todas es la mejora continua que deriva de una actitud proactiva ante la complejidad del incentivo fiscal. Conocer las últimas tendencias y adaptar la estructura a las necesidades de la familia y de la doctrina de tributos facilitará que las posibilidades de éxito ante una eventual comprobación sean elevadas. Por ejemplo, dominar la diferencia de cómo se calcula el acceso al régimen de la empresa familiar y el alcance de los beneficios asociados es una habilidad clave para poder hacer una hoja de ruta de inversión y trabajar el balance.

En definitiva, la clave es preparar a la família empresaria con formación específica sobre la transcendencia de este régimen tributario, lo que conlleva intentar unificar los criterios que siguen las empresas del grupo, los directivos y, por supuesto, los miembros de la familia en su tributación personal.

Autores: Xavier Calaf, Xavier Xivillé y Óscar Bertrán, socios del  Área Financiera y Tributaria de Cuatrecasas